"LOS ESTADOS TRANSPARENTES"
MÚSICA EN
Suena el gong de la tarde en el dorado
resol de los cristales y el sonido,
que inflama unos segundos la pereza
de la sala, se va por la caoba
de los muebles crujientes.
El velero
del cuadro del rincón, fija su rumbo
de seguro naufragio a los escollos
de encrespado nogal que emerge en tallas
amenazantes por el marco.
Gimen
los goznes y el espectro de otros seres
actores de otras dichas, se recorta
contra el castaño de la puerta.
Un duende
da suelta a la melancolía, siglos
hace cautiva, en la nudosa tuya
de la caja de música.
Escondida
tras el reloj, la muerte observa.
Un aire
de mimada convalecencia mece
afuera las acacias y los tilos
se aturullan los pájaros de siempre.
Como un sabor, como una dulcedumbre
concéntrica, por vetas y cortezas
y troncos que conservan, desde antes
de la historia, grabados nuestros nombres,
se alza, se expande, crece, nos inunda
la espesa música de la madera.
QUIÉN NO HA ESCUCHADO EL CRUJIR DE
2 comentarios:
Belleza de poema. El crujir de la madera desvela sentimientos inolvidables...Deseo que estés fenomenal, gracias por compartir la poesía...Un beso. Mari Carmen.
Simplemente decirte que me encantóoooooooo. Un abrazo
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