sábado, 24 de junio de 2017

solsticio de verano

La noche de San Juan
(Jorge Luís Borges )

El poniente impecable en esplendores
quebró a filo de espada las distancias.
Suave como un sauzal está la noche.
Rojos chisporrotean
los remolinos de las bruscas hogueras;
leña sacrificada
que se desangra en altas llamaradas,
bandera viva y ciega travesura.
La sombra es apacible como una lejanía;
hoy las calles recuerdan
que fueron campo un día.
Toda la santa noche la soledad rezando
su rosario de estrellas desparramadas.
*****


Noche de san Juan
(Juan Luís Panero)
Anticuado, interrogo las estrellas,
su desnudo, inapelable misterio,
mientras miro las llamas en la playa,
en esta noche cuando empieza el verano.
Lector de Drieu o Pavese, sé también
lo sencillo que puede ser acabar con la historia,
no preguntar ya nada, olvidar para siempre
esta apariencia de tarjeta postal.
Frente a mí, imperturbables, desveladas,
pasan, en silencio, vida y muerte,
evitando, con un rictus cansado,
este fantasma insomne, este papel en blanco,
esta hoguera apagada que perdura.
+++


"Noche de San Juan, solsticio de verano,
quema lo viejo, salta el fuego y pide un deseo"
Jesús Paredes Ortiz.
  
Montado en un caballo blanco que galopa
por la arena de la playa, cabalgo por la bahía,
busco  una noche de magia y un alma me acompaña,
se acerca ya el crepúsculo, flores,  salitre y playa.

Las estrellas y un lucero me darán su cobijo de cielo,
la hierba y las flores me sirven de alfombra en la tierra,
la luna me guía y el rocío anfitrión me da su bienvenida,
el romero con su olor me alimenta y las coronas de hiedra.

Cánticos y bailes de fuego se disponen en conjuro,
y es la noche de San Juan, la noche mágica, un rito,
al olivo un abrazo, entre hiedras salto las chispas de la fogata
y en un baño de mar salado nace el bautismo con luz de hoguera.

Y un nuevo camino se abre con la aurora,
empieza por la vereda que el mar me guía,
me quema la fragancia de madreselva y a lavanda se respira,
el árbol para mí es sagrado y el círculo me abraza.




Recluido en casa, a merced del ventilador, hoy no me atreví a salir. Ayer palme con un golpe de calor. Dormí toda tarde. Esta noche la Verbena de San Juan. En la plaza habrá fuego y petardos, no me gustan nada. Soy un hombre/perro, aunque sordo los escuchare. Vivo aislado sin ruidos. La oreja izquierda, hace años que no oigo bien o nada. La oreja derecha está sorda, como el mismo gobierno, esperando ser lavada el próximo jueves (tapón de cera), eso sí, después del almuerzo con mi amigo Alfredo. Así que los coches para mí todos son eléctricos, sin ruido. Los petardos los oiré todos pero de baja intensidad.
La poesía me entretiene, me acompaña, me distrae en parte de mí ELA. Estos autores buscados al azar, servirán para acompañar mis fotografías. Josep 

No hay comentarios: